sábado, 18 de febrero de 2012

Por Sobrescobio: pisando nieve por la majada y collada Imblemes


     Estamos en Soto de Agues, concejo de Sobrescobio. Aquí se concentran muchas rutas de montaña, y la más conocida y popular es la llamada Ruta del Alba, por el desfiladero del río Llaimo. Salimos del barrio de Soto y cruzando el puente vamos al barrio de San Andrés.

Potro de herrar


     Cuadras agrupadas y "parva" de "cuchu" en la antojana, como siempre se hizo. Ahora las normas son más estrictas para cómo tratar cucho y purines de las cuadras.


     Hórreo con una colmena en un tradicional "truébanu" hecho con un tronco vaciado.

El río Nozalín

    

     Vamos caminando por la vega de Soto y Agues y comienza a despejar la niebla. Nos aparecen a la vista las peñas de Les Crespes y el Guanalón.


     El camino tradicional sube por un arbolado de castaños.

Tela de araña congelada como el día.



    
     En el "castañéu" se conservan los tradicionales "corros" que se utilizaban para conservar las castañas para que se desprendiesen mejor del "oriciu".



     Después de un buen rato subiendo vamos llegando a Ladines, situado en una soleada ladera.


     En un mirador con vistas a Soto nos tomamos un pequeño descanso. Los picos que cierran el valle son el picu Llagu, en sombra, las laderas nevadas del Cuchu a lo lejos, el picu La Llomba, el afilado Corbellosu, el Cogollu, el Guanalón y Les Crespes.


    

     Subimos junto a la iglesia de Ladines y nos fijamos en un hórreo donde hay varias colmenas, tradicionales de "truébanu" y más modernas de cajón.


     Nos gustan las casas y cuadras arregladas que vamos viendo al subir la cuesta hacia la pista que vamos a tomar, pero no nos paramos;  las veremos en detalle a la vuelta.


     Subiendo un poco de espaldas a nuestro objetivo de hoy, damos vista por la ladera norte a la sierra de Peña Mayor, con el Trigueiru a la izquierda y la peña La Chamoca más a la derecha.


     Cuando el camino vuelve a la vertiente sur y vamos ganando altura vemos a lo lejos nevadas Peña Mea, las Peñas Negras, la Forcada, el Cuchu ...

Enderezamos rumbo sur de nuevo por las cabañas de Faidiellu.

    
Colmenas protegidas por el alero de la cuadra y bien orientadas al sur.
    

     En Les Collaínes vemos nuestro camino, encajado entre el Cantu los Rubios y la peña Collargayos que es en principio la cumbre objetivo de hoy.


     Desde Les Collaínes se llegaría fácil y cómodamente al Cantu Cumbral o Caón, que es una atalaya sobre el embalse de Tanes.


     Asomándose a la vertiente del concejo de Caso con los montes que hacen límite con Infiesto.


     Nuestro camino va a subir por el bosque de la izquierda hacia la zona nevada; luego para subir al Collargayos habría que seguir la arista con árboles que se ve hasta la cumbre de la derecha.

Imponentes ejemplares de haya.


    


     Caminando por el bosque pisamos ya  la nieve. Seguimos unas huellas por la nieve dura que nos facilitan la subida.

Una pequeña covacha con agua en el interior. Parece haber sido excavada, como una bocamina.


     Llegando a las camperas de la majada Imblenes la capa de nieve es mayor. Hay numerosas huellas; creemos distinguir las pezuñas de corzo, las mayores - y más sucias, arrastrando la barriga - de jabalí; pequeñas huellas de "raposu" que se cruzan varias veces y también huellas de perro que acompañan a las tres huellas de "humanos" que nos precedieron.



     A la altura de las derruidas cabañas redondas de la majada Imblenes hay una indicación para una vista panorámica: asomádose al Xerru Piqueru tenemos a la vista  la crestería entre bosque y roca que lleva a la cumbre del Collargayos ...


     ... el valle, con Soto de Agues abajo y las cumbres que llevamos viendo durante la subida.


     Subimos hacia la collada Imblemes: desde aquí habría que subir por la arista entre el límite del bosque y la roca a coronar la peña.


     Al fondo vemos el Torres, en San Isidro, y las laderas del Valmartín y el Cascayón, que llevan hacia la Peña del Viento.


     Después de comer y de un rato de descanso retomamos el camino de vuelta, de nuevo por el bosque.


     En Les Collaínes vemos cómo las nubes se van apoderando de las cumbres de la cordillera, que con su altura frenan el frente que nos amenaza con lluvias para mañana.


     Dejamos atrás el Collargayos, con la línea de cumbres que lleva a La Mezquita, que sería la siguiente cumbre. Ya haremos esta travesía otro día, sin nieve, en tiempo más cálido que el de hoy, aunque no hay queja porque aunque frío hace un día estupendo.


   



     De nuevo llegamos a Ladines. Pararemos a descansar y recorrer sus calles. Arquitectura asturiana, original unas casas y restauradas otras.



     En el hórreo de esta mañana, las abejas están a esta hora activas, a pesar de que poco tienen que libar ahora que casi no hay floración todavía



      Hórreos, cuadras, casas viejas, casas restauradas o de nueva construcción, pero respetando el estilo tradicional.



     Incluso un veterano Jeep Willys, que doy fe que está en uso porque subió por la pista hasta Les Collaínes esta mañana. Fijaros en la matrícula, la de años que tiene este superviviente. En casa hubo un Citröen 2 CV también matrícula de Madrid y seis números. A ver si Paco hace memoria y nos acordamos de la matrícula.






     Bajamos de Ladines por la carretera a Soto de Agues para no volver a pisar el barro del camino de esta mañana. Detrás de Ladines la subida de hoy y la cumbre del Collargayos.


     De nuevo en Soto de Agues, justo cuando se nubla el cielo. Detrás la cresta entre el Collargayos y la Mezquita, que habrá que recorrer en otra ocasión. Ya nos alcanzó el frente que nos prometían los meteorólogos, y se nota cómo baja de golpe la temperatura a sólo 9ºC. Es hora de volver a casa.

                                               ¡Un saludo!